martes, 21 de mayo de 2019

EL CENTRO MUNICIPAL INTEGRADO DEL LLANO CONTINÚA LA PROGRAMACIÓN DE DE SU CINE-FORUM “RECUPERANDO LA MEMORIA HISTÓRICA” EN EL PRIMER SEMESTRE DE 2019 (SEGUNDA PARTE DEL CICLO “FILMÁBAMOS AYER…”) CON LA PROYECCIÓN DE PASCUAL DUARTE (1976) DE RICARDO FRANCO (27 DE MAYO)


Resultado de imagen de Pascual Duarte (1976) de Ricardo Franco
El Centro Municipal Integrado de El Llano (c/ Río de Oro, 37- Gijón), en la sesión del mes de Mayo-2019 (Lunes, día 27, a las 19 horas) da continuidad a su Cine-Forum “Recuperando la Memoria Histórica, siguiendo con la segunda parte del Ciclo “Filmábamos ayer…: Francisco Rovira Beleta, Luís García Berlanga, Luís Buñuel, Jesús Franco, Ricardo Franco, José María Gutiérrez Santos” (que seguirá haciendo una cala en lo mejor -y más olvidado- del cine clásico español de grandes directores ya fallecidos)… Esta actividad, organizada en colaboración con el Departamento de Proyectos Culturales de la FMCEyUP del Ayuntamiento de Gijón, continúa con la proyección de Pascual Duarte (España, 1976) de Ricardo FRANCO RUBIO (Madrid, 24 de Mayo de 1949- 20 de Mayo de 1998)… 
Resultado de imagen de Ricardo Franco RubioPrimer largometraje de ficción en sentido estricto (tras la película experimental El desastre de Annual [Un invierno sin futuro], 1970; un par de cortometrajes, Gospel, 1969, y El increíble aumento de la vida, 1974; y un documental televisivo, África Occidental hoy, 1973) de un director sorprendente iniciado en el cine, tras sus sucesivos y frustrados estudios de Derecho, Filosofía y Medicina, de la mano de su tío, el inclasificable Jesús Franco… De carrera breve, pausada e  irregular en la gran pantalla (con más presencia en las series de la pequeña), golpeada desde sus albores por la censura franquista, encontraría ya, sin embargo, cierto reconocimiento del público (no en España) y la  crítica con esta adaptación de la famosa novela La familia de Pascual Duarte (1942) de Camilo José Cela que había supuesto el punto de partida del tremendismo… 
Imagen relacionadaEn ella se nos narra la historia del  campesino y cazador furtivo Pascual Duarte (José Luís Gómez) , reclutado a la fuerza para la Guerra del Rif (1911-1927) y que malvive en su pobreza huraña, dominado por un sino silente y solitario de mala ventura. Como tantos compatriotas rurales de esas brutales, míseras y lúgubres décadas primeras del siglo XX, Pascual Duarte es el símbolo, uno entre muchos, de quienes, incapaces incluso de expresar lo que piensan y sienten, han de recurrir a feroces analogías con las bestias o a un uso manido del refranero popular, em muestra tan irrefutable como recia de las insalvables diferencias socioculturales (y, claro, económicas) que fragmentan la identidad colectiva de una tierra, dinamitando cualquier atisbo de verdadera cohesión social entre los modos de vida que determinan. Porque Pascual vivirá toda su vida, desde esa Extremadura rural, preso de su carencia de habilidades sociales e inmerso en una violencia estructural que acabará por ser parte del aire que respira hasta determinar cada uno de sus actos y ser la única respuesta ante cada problema que la plantea la vida. Pero la misma sociedad que lo proscribe y lo sitúa ante un abismo de (auto)destrucción se mostratá muy diligente a la hora de juzgarle y darle la condición de víctima propiciatoria… A la que sólo le cabe esperar un final trágico acorde al fatalismo de su existencia.
Imagen relacionada  La propuesta del productor Elías Querejeta para adaptar la tremendista novela de Cela, permitió a Ricardo Franco anticipar ya su mejor pulso (en realidad, no lo recuperaría hasta bien entrados los años 90, primero con Después de tantos años, 1994 -continuando la historia de la familia Panero iniciada por Jaime Chávarri con El desencanto en 1976-, y, sobre todo, con la propuesta que, ya enfermo y casi ciego, recibe del productor Pedro Costa para rodar La Buena Estrella en 1997) para convertir unos hechos de insólita violencia, dolor y soledad, en un verdadero tratado en imágenes sobre los sentimientos elementales y la condena que supone la imposibilidad (cultural) de expresarlos más que con la furia agresiva, permitiendo a su cámara deambular por lo mejor (poco) y lo peor (mucho) de las pasiones humanas desatadas por un contexto hostil, más allá de los tópicos al uso y las moralinas fáciles… A ello sirve ejemplarmente la espléndida la interpretación de José Luís Gómez dando cuerpo al fatalismo del personaje a través de largos silencios y miradas perdidas en el vacío… Drama rural durísimo, áspero hasta la asfixia, Pascual Duarte se dota de una puesta en escena tan contenida como meticulosa para envolver el vacío y la enajenación de un tremendo sujeto, aniquilado por una sociedad purulenta en su radical desigualdad… Y se constituye en una propuesta totalmente ajena a los catálogos del cine español de la época.
Imagen relacionadaPor ello, obtuvo una tan menguada respuesta del público nacional como reconocimiento crítico e internacional (algo habitual en las producciones de Querejeta), obteniendo el Premio al Mejor Actor (José Luís Gómez) en el Festival de Cine de Cannes 1976, su estreno mundial, así como la nominación a la Palma de Oro a la Mejor Película; y el Premio Sant Jordi 1977, de Radio Nacional de España en Barcelona, al Mejor Actor Español (José Luís Gómez).
Resultado de imagen de Pascual Duarte (1976) de Ricardo FrancoComo siempre, se proporcionará a las personas asistentes documentación sobre la producción proyectada (Ficha técnica y artística, carteles, biografía del director, sinopsis, y comentarios histórico, ético-político y cinematográfico) realizada por el coordinador del Cine-Forum (José Ignacio Fernández del Castro); para, tras la proyección, desarrollar un pequeño coloquio. La sesión se celebrará en el Salón de Actos (Planta Baja) con asistencia libre. Resulta importante señalar la necesidad de acudir puntualmente a la hora fijada, pues, para evitar ruidos que interfieran la proyección, una vez iniciada la misma, se cerrarán las puertas de acceso a  la sala.