El
Centro Municipal Integrado de El Llano (c/ Río de Oro, 37- Gijón), en la
sesión del mes de Febrero-2016
(Lunes, día 22, a las 19 horas) de su Cine-Forum “Recuperando la Memoria Histórica ”,
como inicio de la cuarta entrega del Ciclo “Miradas de Mujer” (que ofrecerá muestras
de la obra de jóvenes directoras hispanas con opera prima en el tercer milenio, como Roser Aguilar, Silvia Munt,
Juana Macías, Elena Trapé, Paula Ortiz y Neus Ballús),,
presentará la obra Pretextos (España, 2008),
de Sílvia MUNT
QUEVEDO (Barcelona, 24 de Marzo de 1957)..
Formada en la danza (entre 1973
y 1978 fue bailarina y coreógrafa, entre otras, de lascompañías de Gelu Barbu y del Ballet
Contemporáneo de Barcelona), actriz de largo recorrido en el
teatro (desde 1977, con la adaptación del poema épico Canigó de Jacint
Verdaguer dirigida por Esteve Polls), el cine (desde 1978, con su participación
en L’orgia
de Francesc Bellmunt) y la televisión (desde 1981, cuando hiciera la adaptación
para TVE de La plaza del diamante de
Francesc Betriu), iría asumiendo roles de producción (desde su propia compañía
teatral creada en 1987) y dirección teatral (Una comedia española,
2009, de Yasmina Reza), dirección televisiva (desde Quia, 2000, telemovie para TV3) y el cine (desde los cortometrajes Déjeme que le cuente,
1998, y Lalia, 1999 –que recibiera el Goya la Mejor Cortometraje Documental-, y el largometraje
documental Elena
Dimitrievna Diakonova. Gala. 2003)…
Pretextos es la opera prima en el largometraje de ficción (y única, hasta el momento) de esta
carismática profesional de la interpretación en sus más diversos frentes, y en
ella nos habla de una crisis matrimonial, la de Viena (Sílvia
Munt)
y Daniel (Ramon
Madaula): ella es una directora de teatro
a punto de estrenar su última creación, una meditación sobre el deseo
protagonizada por su querido Ricardo (Francesc Garrido); él es médico en un geriátrico, donde trata de digerir su
tedio vital hablando de la vida y la muerte con Eva (Laia Marull), una de las enfermeras… Ambos se agarran a sus respectivos trabajos para tratar
de compensar la abrumadora desolación de sus vidas, y lo saben; pero sus
realidades y sus demandas parecen alejarse cada día más, hasta hacerse casi incompatibles,
sumida su cotidianidad en la más lacerante de los desamparos: esa soledad en compañía que se puebla de
anhelos insatisfechos y promesas que se sabe que no se cumplirán, aunque aún
sean capaces de convertirse en un pretexto
para seguir viviendo… Porque, pese a que el suicidio aparezca siempre como
un telón de fondo inevitable (tras Lucas –Álvaro Cervantes-, ese hijo que, como un zombi, surge siempre en los lugares más insospechados; tras esa enfermera siempre sorprendente en
su derivas emocionales ante el doctor; tras esa pareja de intérpretes teatrales que sólo
encuentra su ser en la propia representación de las llagas sentimentales de su
directora…), Viena y Daniel persiguen en el
fondo idénticas quimeras: un bálsamo contra la soledad y un amor auténtico que no necesite pretextos.
Pretextos es, pues, un drama psicológico
sobre la crisis de la pareja, sobre
las soledades acompañadas y los amores furtivos, sobre los anhelos insatisfechos…
Y, claro, sobre los pretextos. Es teatro dentro del cine, ficción
dentro de la realidad que nos habla de unos seres solitarios cuyas vidas se
entretejen en el sinsentido de la vida, permitiéndoles apenas aspirar a una dicha de mínimos. Mundos unidos por la representación (lo aparente) y distantes en sus latidos
(lo esencial) que van poblando la
pantalla de imágenes en un esquema estructural tan complejo en lo formal. Como atribulado
y agorero en su evaluación de la vida y del amor… Cierto es que su puesta en
escena apuesta radicalmente por lo teatral y que buena parte de sus diálogos
tienen una voluntad sentenciosamente racionalista, pero es cine valiente sobre
conflictos interiores en situaciones dramáticas que, a fin de cuentas, son una
parte de la vida (eso sí, la más sombría, la menos luminosa).. Una película que recupera,
en definitiva, “el espíritu del arte
y ensayo”, Ingmar Bergman o John Cassavetes dixit, en el abordaje de los asuntos existenciales desde la honesta
circunspección. Por todo ello ha
tenido reconocimientos
críticos como las Biznagas de Plata a
la Mejor
Dirección y la Mejor Fotografía (David Omedes), con
nominación a la Biznaga de Oro a la Mejor Película, en el Festival
de Cine Español de Málaga 2008; además de nominaciones al Globo de Cristal a la Mejor
Película en el Festival Internacional
de Cine de Karlovy Vary (República Checa) 2008; a la Violette
d'Or a la Mejor
Película en el Festival Cinespaña de Toulouse (Francia)
2008, al Premio Butaca 2008 de la audiencia
cinematográfica catalana a la Mejor Actriz de Cine Catalana (Sílvia
Munt); y a los Premios Gaudí 2009 de la Acadèmia del Cinema Català a la Mejor
Dirección y a la Mejor
Actriz Principal (Sílvia Munt).
Como siempre, se
proporcionará a las personas participantes documentación sobre la obra
proyectada (Ficha técnica y artística, carteles, biografía de la directora,
sinopsis, y comentarios histórico, ético-político y cinematográfico) realizada
por el coordinador del Cine-Forum (José
Ignacio Fernández del Castro); para, tras la proyección, desarrollar un
pequeño coloquio. La sesión se celebrará en el Salón de Actos (Planta Baja) con asistencia libre.
Resulta
importante señalar la necesidad de acudir puntualmente a la hora fijada, pues,
para evitar ruidos que interfieran la proyección, una vez iniciada la misma, se
cerrarán las puertas de acceso a la sala.